jueves, 22 de diciembre de 2011

Oxford- Windsor- Salisbury

Hoy era nuestro tercer día de escapada y aún nos quedaban cosas de Oxford por ver, así que decidimos dedicar una parte de la mañana a ver lo que nos apetecía.

Cogimos nuestras maletas con nuestras cosas, las guardamos en el coche y pusimos rumbo al centro de Oxford. Esta vez aparcamos el coche en un calle cerca de la Universidad que nos costó 2 libras (muy barato, en comparación con las otras veces).

Vimos el University Museum, el de Historia Natural, el Keble College y dimos un paseo por el University Park.














Cuando nos planteamos el viaje nuestra primera intención era visitar Stratford-upon-Avon, pero en la preparación del viaje me di cuenta que Windsor no estaba lejos de Oxford y como los dos teníamos muchas ganas de ver el Castillo de Windsor, dejamos la visita a Stratford-upon-Avon para otra escapada a Inglaterra y decidimos acercarnos a Windsor a ver el famoso castillo.

A Windsor le separan unos 60 kilómetros de Oxford, así que volvimos a coger el coche y nos fuimos a ver lo que en realidad más que un castillo es una ciudad fortificada.

El Castillo de Windsor fue Construido por Guillerme el Conquistador dentro de lo que era un bosque de caza real (ahora el gran parque de Windsor).

Después de la conquista normanda de 1066, el Castillo de Windsor ha sido sucesivamente ampliado, adaptado y reconstruido por monarcas desde Enrique II hasta la Reina Isabel II. La Reina y los otros miembros de la familia real continúan pasando la mayoría de sus fines de semana privados en el castillo y el mismo permanece como un punto de reunión para visitas ceremoniales de jefes de Estado de otros países. 

También es sede de algunas de las más famosas pinturas y obras de arte en la colección real que se exhiben en todos los magníficos interiores del castillo. En la visita, se ven los departamentos de estado, los recintos, la exhibición del castillo, la galería de dibujos, la casa de muñecas de la Reina María y la capilla de San Jorge (excepto los domingos cuando la capilla está cerrada a los visitantes). 
Entre octubre y marzo las habitaciones semi-estatales (usadas por la Reina para sus huéspedes oficiales) están abiertas al público sin ningún precio adicional. 

El castillo abre a las 9.45 a.m. La última admisión es a las 4 p.m. (de marzo a octubre) o a las 3 p.m. (de noviembre a febrero). 

El cambio de la guardia tiene lugar diariamente entre abril y julio y en días alternos de agosto a marzo (pero nunca en un domingo) y es uno de los puntos de interés de una visita a Windsor. 

Para entrar al castillo hay tres tarifas: estandar, familiar y grupos. La tarifa estandar son 15,50 libras por persona, que es lo que tuvimos que pagar nosotros. Cuando entras al castillo te dan una audioguía que te va explicando todo lo necesario.

No se pueden hacer fotos en el interior del castillo pero si en sus exteriores.












 




Después de ver el Castillo de Windsor, dimos una vuelta por el pueblo pequeñita (todo hay que decirlo) y nos fuimos de camino a nuestro próximo alojamiento, que nos seperaban 120 kilómetros: SALISBURY.

En Salisbury cogimos la habitación en un B&B desde la página de la ciudad y tengo que deciros que aunque la decoración era al estilo inglés, no me importaria volver a repetir porque la dueña es muy simpática y amable.

Nada más llegar cenamos y nos fuimos a dormir, que al dia siguiente teniamos que ver muchas cosas y nos íbamos ya para casa.

No hay comentarios:

Publicar un comentario